Frases Violet y Finch
El
mundo nos rompe a todos, más después, algunos se vuelven fuertes en los lugares
rotos.
ERNEST HEMINGWAY
Acción de
Gracias, Navidad y Año Nuevo. No sabría decir qué es lo que ha sido distinto
esta vez, solo que cuando me desperté me sentí más muerto de lo habitual.
Despierto, sí, pero completamente vacío, como si alguien se hubiera estado
alimentando de mi sangre. Ahora estoy en mi sexto día desde que volví a
despertar y en mi primera semana de clase desde el 14 de noviembre.
Finch
–¡Damas y caballeros!
–grito –. ¡Les doy la bienvenida a mi muerte!
Cabría esperar que dijera vida,
ya que acabo de despertar, pero es justo cuando estoy despierto que pienso en
morirme.
Finch
Podría saltar. Estaría hecho en cuestión de segundos.
Se acabó Theodore el Freak.
Se acabó sufrir. Se acabó todo
Finch
La percibo
durante un minuto: la sensación de paz cuando mi mente se acalla, como si ya
estuviera muerto. Soy ingrávido y libre. Nada ni nadie que temer, ni siquiera a
mí mismo.
Finch
Y de repente noto
que pasa el momento, que tal vez ya ha pasado, y ahora me parece una idea
estúpida.
Finch
–¿Me permites que te pregunte una cosa?
¿Crees que el día perfecto existe?
–¿Qué?
–Un día perfecto. De principio a fin. En
el que no ocurre nada horroroso, ni triste, ni ordinario. ¿Crees que es
posible?
–No lo sé.
–¿Has tenido alguna vez uno?
–No.
–Yo
tampoco, pero lo busco.
Violet & Finch
–¿Por qué haces eso, guëy?
–Porque todos tenemos que morir algún
día. Y quiero estar preparado.
Finch &
Charlie
La verdad es que
estuve enfermo, pero no de algo que se explique tan fácilmente como una
gripa. Mi experiencia me ha dado a entender que la gente se muestra mucho más
compasiva cuando te ve indispuesto, y por millonésima vez en mi vida pienso en
que ojalá tuviera el sarampión, la viruela o cualquier enfermedad que todo el
mundo comprendiera para de este modo facilitar el
asunto, tanto para ellos como para mí. Cualquier cosa sería mejor que
la verdad: Volví a
desconectarme. Me quedé en blanco. Estaba patinando y al momento siguiente mi
mente empezó a trazar círculos como un perro viejo y artrítico que intenta
ponerse cómodo antes de acostarse. Y luego de apagó y me fui a dormir. Pero no
a dormir como duerme la gente cada noche. Imagínate un sueño prolongado y
oscuro en el que no puedes ni siquiera soñar.
Finch
Lo que no digo
entonces es: Quiero seguir vivo.
Y no lo digo porque, teniendo en cuenta la gruesa carpeta que tiene delante,
jamás me creería. Y una cosa más que tampoco creería: estoy luchando para
permanecer en este mundo asqueroso de mierda. Lo de subir a la cornisa del
campanario no tiene nada que ver con la muerte. Tiene que ver con el control.
Tiene que ver con no volver a dormirme nunca más.
Finch
No debería importarme porque no duele. Desaparezco y
ya está.
Violet
Lo que pasa con
la comida es que hay cosas muchísimo más interesantes que hacer. Lo mismo me
pasa con el dormir. Son una pérdida de tiempo.
Finch
Continúo aquí, y
me siento agradecido, porque de lo contrario estaría perdiéndome
todo esto. A veces, estar despierto está bien.
Finch
Nos turnaremos
para elegir el lugar a visitar, pero tendremos que estar también
dispuestos a ir allí donde la carretera nos lleve. Lo que se traduce en lo
grandioso, lo pequeño, lo raro, lo poético, lo bello, lo feo, lo
sorprendente. Como la vida. Pero absolutamente, incondicionalmente,
decididamente, nada normal.
Reglas de Finch
para las excursiones
Mis padres son
perfectos, como Ryan. Son fuertes, valientes y me quieren, y aunque sé que
deben de llorar, enojarse y tal vez incluso tirarse cosas a la cabeza cuando
están solos, rara vez me lo demuestran. Me animan a salir de casa, a volver a
subir al coche y a circular por la carretera, por decirlo de algún
modo. Escuchan, preguntan y se preocupan, y están siempre ahí para
ayudarme. Si acaso, están quizá demasiado ahí para ayudarme. Necesitan saber adónde
voy, qué hago, a quién veo y cuándo volveré. <<Mándanos un mensaje
cuando vayas allá. Mándanos un mensaje cuando estés ya de vuelta en
casa.>>
Violet
Desde que dejé de
escribir, leo más que nunca. Palabras de otras personas, no mis
palabras: mis palabras se han volatilizado.
Violet
Me
encanta el universo de mi habitación. Estoy más a gusto aquí que fuera porque
aquí puedo ser lo que quiera. Soy una escritora brillante. Soy capaz de
escribir cincuenta folios al día y jamás me quedo sin palabras. Soy una
estudiante matriculada en el programa de escritura creativa de la NY. Soy la creadora
de una popular revista online, no la que hacía con Eleanor,
sino una nueva. No le tengo miedo a nada. Soy libre. Estoy a salvo.
Violet
Finch: Eso depende de a quién se lo preguntes. Mira, yo no creo que sea tarde.
Creo que es temprano. Temprano en nuestra vida. Temprano para esta noche.
Temprano para lo que llevamos de año. Si lo cuentas, verás que lo temprano
supera lo tarde. Es solo para hablar. Nada más. No tengo intención de hacerlo
contigo.
Finch
El amor es verdaderamente el gran manifiesto; se
quiere ser, se quiere ser importante, se quiere, si de morir se trata,
morir con valentía, con clamor, perdurar, en suma.
Cesare Pavese
–Estabas allá
arriba porque ya no sabías dónde ir ni qué más hacer. Habías perdido
todas tus esperanzas. Y entonces, como un gallardo caballero, yo te salvé la
vida. Por cierto, sin maquillaje estás completamente distinta. No peor, no
quiero decir eso, sino distinta. Tal vez incluso mejor.
Finch
–Pero ese no fue el motivo. El porqué es
ya nada importa. Ni el instituto, ni ser provista, ni los novios, los
amigos, las fiestas, los programas de escritura creativa, ni...Todo eso no son
más que cosas para llenar el tiempo hasta que muramos.
Violet
Si algo he
aprendido es que hay que sacar el máximo provecho de todo.
Finch
Sinceramente, Violet. No sé por qué no gusto a nadie. Mentira. Quiero
decir que lo sé pero no lo sé. Siempre he sido diferente, pero para mí
la diferencia es normal. Me decanto por una versión de la verdad.
Finch
–Eso y que a veces digo y hago cosas
sin pensar. Y eso a la gente no le gusta.
Finch
Siempre me ha
maravillado lo de la gente y el sueño. Yo ni siquiera dormiría de no tener que
hacerlo.
Finch
Inútil.
Estúpido. He crecido oyendo constantemente estas palabras. Son
palabras que intento superar, porque si permito que se queden ahí, aumentarán
de tamaño, me llenarán por completo y lo único que quedará de mí será
un <<monstruo inútil estúpido inútil estúpido inútil
estúpido>>. Y no puedo hacer otra cosa que correr con todas mis fuerzas y
llenarme con otras palabras. Esta
vez será diferente. Esta vez me mantendré despierto.
Finch
Todo esto lo
convierte repentinamente en algo real. El peso de lo que sucedió aquí podría
hundirme como una piedra en la tierra hasta quedar engullido por entero.
Finch
–Porque a la gente le gusta que
finjamos, Kate. Lo prefiere.
Finch
Tecleo: Mi cerebro es la maquinaria más
inexplicable, zumba, tararea, se eleva, ruge, se zambulle y luego se hunde en
el lodo. ¿Y por qué? ¿Para qué tanta pasión?.
Finch
Si todo lo demás pereciera y él se salvara, yo
seguiría existiendo; y si todo lo demás permaneciera y él fuera aniquilado, el
universo se convertiría en un imponente desconocido.
Emily Brontë
Tú tienes que
vestirte para complacerte a ti. Si no le gustas por lo que eres, es que no
la necesitas para nada.
Ben
Añoro el Londres
que he dejado atrás. Sí, señor. Caminando
por los pasillos me queda claro que Finch el Cabrón británico
funcionará. Se hará el dueño del mundo. Será un mundo de compasión, de vecinos
que aman a sus vecinos, de estudiantes que aman a otros estudiantes o que, como
mínimo, los tratan con respeto. Sin juicios de valor, sin crueldad. Sin
ponerles apodos. Sin nada de todo eso, nada de nada.
Finch
–No hay mejor momento que el presente, y
todo eso que se dice. Tú, precisamente, deberías saber que solo tenemos
garantizado el ahora.
Finch
–¿Obelisco?
–Es mi palabra favorita.
–¿En serio?
–O una de
ellas, como mínimo. Mírala. –La miro–. Es una palabra genuina, destacada,
potente. Única, original y casi furtiva, porque en realidad no suena como lo
que es. Es una palabra que te sorprende y te hace pensar: Oh, bien. Impone respeto, pero por otro
lado es modesta. No como monumento o torre. –Niega con la cabeza–.
Esas son palabras cabronas y pretenciosas.
Violet &
Finch
–Reír está bien, debes saberlo. Ni
se abrirá la tierra. Ni tampoco te irás al infierno. Créeme. Si el infierno
existe, iré allí antes que tú, y estarán tan ocupados conmigo que ni
siquiera podrán admitirte.
Finch
–He oído contar muchas historias.
–¿Sobre
mí?
–¿Son
ciertas?
–Seguramente.
Violet &
Finch
Pero veo que él
no va a ningún lado, y entonces su mano localiza de nuevo la mía. En lugar de
retirarla, me obligo a mantenerla allí, y es agradable, la verdad. La corriente
eléctrica se acelera. Mi cuerpo zumba. Se levanta la brisa y agita las
hojas de los árboles. Es casi como música. Permanecemos así, el uno junto al
otro, mirando a nuestro alrededor.
Violet
–Porque me sonreíste.
–¿Qué?
–Me
preguntaste por qué quería hacer esto contigo. Y no es porque estuvieras allá
arriba en la cornisa, como yo, aunque eso también forma parte del asunto. No es
porque sienta esta extraña responsabilidad de vigilarte, aunque eso también
forma parte del asunto. sino porque me sonreíste aquel día en clase. Una
sonrisa de verdad, no esa sonrisa de mierda que ofreces siempre a todo
el mundo y en la que tus ojos hacen una cosa mientras tu boca hace otra.
–No fue más que una sonrisa.
–Tal vez
para ti.
–Sabes que
estoy saliendo con Ryan Cross.
–Me pareció oírte decir que ya no es tu
novio. –Y antes de que me de tiempo a recuperarme, empieza a reír–. Relájate.
No me gusta cuando estás así.
Violet &
Finch
Como todas las
cosas que no perduran, el día de hoy se ha ido, pero ha sido un día bastante
bueno. El mejor en muchos meses.
Violet
–He
aprendido que en este mundo existe el bien si te esfuerzas por
encontrarlo. He aprendido que no todo el mundo es decepcionante, y en eso
me incluyo a mí, y que un montículo de 383 metros puede parecer más alto
que un campanario si te encuentras al lado de la persona adecuada.
Finch
Has sido en todos los sentidos todo lo que alguien
puede ser. Si alguien hubiera podido salvarme, habrías sido tú.
Virginia Woolf
Camina unos
metros por delante de mí, haciendo ver que yo no existo, pero ya me parece
bien, estoy acostumbrado, y lo que ella no sabe es que esto no me perturba en
absoluto. La gente o me ve o no me ve. Me pregunto cómo debe de ser eso de
andar por la calle, seguro y a salvo en tu pellejo, fundiéndote con los demás.
Sin que nadie se vuelva, nadie se quede mirándote, nadie te espere ni espere
nada de ti, nadie se pregunte qué estúpida locura harás a continuación.
Finch
Este es mi
secreto: en cualquier momento saldré volando y huiré de aquí. Todo el mundo en
la Tierra excepto yo –y ahora también Violet- se mueve a cámara lenta, como si
estuvieran cargados de lodo. Nosotros somos más rápidos que cualquiera.
Finch
–Es una buena manera de averiguar por
qué estamos aquí.
Finch
Tocar la guitarra como Jimmy Page. Componer una
canción que cambie el mundo. Encontrar el Gran Manifiesto. Valer para
algo. Ser la persona que quiero ser y que con eso sea suficiente. Saber qué es tener
un mejor amigo. Importar.
Finch
Dejar de tener miedo. Dejar de pensar tanto. Llenar
los espacios que he dejado atrás. Volver a conducir. Escribir. Respirar.
Violet
<<Antes de morir quiero saber que es un día
perfecto>> <<Y besar a Violet Markey>>
Finch
–Theodore
Finch, en busca del Gran Manifiesto
[…]
–Quiere
decir: La necesidad de ser, de
querer ser importante y, si de morir se trata, morir con valentía, con
clamor... Perdurar, en suma.
Epitafio hecho
por Theodore Finch para Theodore Finch
Me gusta pensar
que los colores, los sonidos y las palabras no tienen nada que ver con él, que
son solo míos y de mi cerebro parecido al de un dios, brillante, complicado,
que zumba, tararea, se eleva, ruge, se zambulle y se hunde.
Finch
Conozco lo
suficientemente bien la vida como para saber que no puedes contar con que
las cosas permanezcan intactas e inmóviles, por mucho que te gustaría que así
fuera. No puedes evitar que la gente muera. No puedes evitar que se
marche. Ni siquiera uno mismo puede evitar marcharse. Me conozco lo
suficientemente bien como para saber que nadie puede mantenerme despierto o
impedirme dormir. Eso también lo llevo dentro.
Finch
He aprendido que
lo mejor es no decir nada sobre lo que en realidad piensas. Si no dices nada,
dan por sentado que no piensas nada, solo lo que les dejas entrever.
Finch
"Tenga
cuidado", implica que todo tiene un final, que tal vez se produzca dentro
de una hora, dentro de tres años, pero un final, de todos modos. ¿Acaso le
daría un ataque si me dijera "Me alegro de verdad por usted, Theodore.
Felicidades por haber encontrado a alguien que lo hace sentir tan feliz"?
Finch
–Cuando mejor pienso es de noche –dice–,
cuando todos duermen. Sin interrupciones. Sin ruido. Me gusta la sensación de
estar despierto cuando nadie más lo está.
Finch
–Uno de los problemas que presenta la
gente es que a menudo se olvida de que lo que de verdad cuenta son las
pequeñas cosas. Todo el mundo está ocupado esperando en el Lugar de la Espera.
Si nos paráramos un momento a recordar que existen cosas como la torre Purina y
una vista como esta, todos seríamos más felices.
Finch
–Todo en este mundo lleva un final
incorporado, ¿no?
Finch
Pero entonces,
una voz en mi interior dice: No eres
ningún héroe. Eres un cobarde. Solo las has salvado de ti mismo.
Finch
Pretende
coleccionar todas las palabras infelices, rabiosas, malas y desagradables para
guardárselas.
–¿Por qué lo haces, Dec?
–Porque no deberían estar mezcladas con
lo bueno. Solo buscan engañarte.
Finch & Dec
La habitación
está tal y como la dejé, y pienso que tal vez no sea la habitación lo que
esté distinto. Tal vez sea yo.
Finch
Me envuelvo ahora
con la colcha, me cubro todo lo que puedo -para no ver ni siquiera la
habitación –y me tiendo en la cama como una momia. Es una manera
de mantener el calor y la luz para que no vuelvan a salir nunca más.
Finch
¿Y si la vida
pudiera ser así? ¿Solo las partes felices, no las horribles, ni siquiera las
medianamente agradables?¿Y si pudiéramos recortar lo malo y conservar lo bueno?
Finch
Precioso es una palabra
preciosa que deberías utilizar más a menudo.
Finch
Eres todos los colores en uno, con su máxima
intensidad.
Finch
El matrimonio
muere. El amor muere. La gente desaparece.
Finch
–Porque a veces, cuando no aguanto más
allí –mueve la cabeza al instituto–, bajo aquí.
Finch
–El resto del mundo no se ha detenido,
¿lo entienden? Todo el mundo continúa con su vida, y es posible que yo no
quiera.
Violet
Porque las personas de mi edad necesitan un lugar
donde buscar consejos o ayuda o diversión o simplemente un lugar donde estar
sin que nadie se preocupe por ellas. Un lugar sin límites, sin miedos, un lugar
seguro, un lugar como su habitación.
Violet
Miro todos los
días que faltan hasta la graduación y la libertad y noto una extraña
opresión en el pecho. No es más que un conjunto de días, menos de un año, y
después quién sabe adónde iré y qué haré.
Violet
–Pues bien, Robert Jordan sabe que va a
morir. Solo existe el ahora,
dice. Si el ahora son dos días,
entonces dos días es tu vida y todo lo que suceda estará en proporción. Nadie
sabe cuánto tiempo tiene por delante, tal vez un mes, tal vez cincuenta años.
Me gusta vivir como si solo tuviera por delante esos dos días.
Finch
Se acaba
demasiado pronto, y quiero repetirlo, porque la vida debería ser así siempre,
no solo durante diez segundos.
Finch
–¿Sabes lo que me gusta de ti, Finch?
Que eres interesante. Que eres diferente. Y que puedo hablar contigo. Pero que
no se te suba a la cabeza.
El ambiente está
cargado y rebosa electricidad. Tengo la sensación de que si alguien
encendiera un cerillo, el aire, el coche, Violet y yo explotaríamos al
instante. Mantengo la mirada fija en la carretera.
–¿Sabes lo que me gusta de ti,
Ultravioleta Marcada? Todo.
Violet &
Finch
Por una vez, no
quiero ser nadie más que Theodore Finch, el chico que ella ve. Él comprende lo
que es ser elegante y eufórico y cien personas distintas a la vez, en su
mayoría con defectos y estúpidas, en parte un cabrón, en parte un torpe, en
parte un bicho raro, un chico que quiere llevarse bien con la gente para no
molestar y, por encima de todo, llevarse bien consigo mismo. Un chico con
sentido de pertenencia... que pertenece a este mundo, que pertenece a su propia
piel. Él es exactamente quien yo quiero ser y quiero que mi epitafio
diga: El chico al que Violet Markey
ama.
Finch
Me pregunto si
podré seguir contando hacia atrás, tomar a Violet Markey y avanzar de nuevo con
ella para disponer los dos de más tiempo. Porque es el tiempo lo que me
da miedo.
Finch
Pero ¿acaso lo de
"para siempre" no lleva también un final incorporado?
Violet
Es un lugar tan íntimo y silencioso que me imagino que somos las dos únicas personas del mundo,
que es como en realidad me gustaría que fuera.
Finch
Lo que más miedo me
da es lo del Ten cuidado. Lo
que más miedo me da es la Caída Larga. Lo que más miedo me da es Dormir y el
destino inminente e ingrávido. Lo que más miedo me da soy yo.
Finch
La tomo de la
mano y saltamos juntos. Y en ese instante no hay nada que temer, excepto la
pérdida de contacto con su mano.
Finch
Siento la tensión
de los pulmones deseosos de aire, pero continúo. Es muy parecido a la tensión
de intentar mantenerme despierto cuando noto que la oscuridad se adentra
en mi piel, cuando percibo noto que la oscuridad se adentra en mi piel, cuando
percibo que pretende llevarse prestado mi cuerpo sin pedir permiso, cuando
intenta que mis manos se conviertan en sus manos, mis piernas en sus
piernas.
Me sumerjo, noto
los pulmones tensos y ardientes. Experimento una remota punzada de pánico,
pero paralizo mi mente antes de propulsar el cuerpo más hacia el fondo. Quiero
ver hasta dónde puedo llegar. Está fuera esperándome.La idea
me llena, pero aún noto que la oscuridad se adentra, a través de los dedos, e intenta
apoderarse de mí.
Menos del dos por
ciento de la gente que se suicida en Estados Unidos lo hace ahogándose, tal vez
porque el cuerpo humano fue construido para flotar. El país número uno del
mundo en ahogamientos, por accidente o intencionados, es Rusia, que
presenta el doble de fallecidos que el país que le sigue, Japón. Las islas
Caimán, rodeadas por el mar Caribe, son las que presentan menos ahogamientos.
Me gusta la
profundidad, allí donde más se percibe el peso del agua. El agua es mejor
que correr porque lo bloque todo. El agua es mi poder especial,
mi forma de engañar al Sueño e impedir que llegue.
Quiero sumergirme
aún más, porque cuanto más profundo mejor. Quiero continuar. Pero alguna cosa
me hace parar. Pensar en Violet. La sensación ardiente de los pulmones. Miro
con anhelo el negro, ahí donde el fondo debería estar no está, y luego
vuelvo a mirar la luz, muy débil, pero todavía ahí, y entonces me impulso hacia
la superficie. Vamos, pienso. Por favor, vamos. Mi cuerpo quiere subir, pero
está cansado. Lo siento. Lo siento, Violet. No volveré a abandonarte.
No sé en qué estaba pensando. Y llego.
Finch
Me da un empujón para apartarme, y luego otro, me
tambaleo pero no pierdo el equilibrio. Permanezco inmóvil mientras me pega, y
luego rompe a llorar y veo que está temblando.
Quiero besarla, pero nunca la he visto así y no sé qué
hará si intento tocarla. Me digo: Por una
vez, no tiene que ver contigo, Fincho. De modo que me mantengo a una
distancia segura y le digo:
–Suéltalo,
todo eso que llevas dentro. Estás enojada conmigo, con tus padres, con la vida,
con Eleanor. Vamos. Suéltamelo. No desaparezcas ahí.
Merefiero a que no se sumerja en su interior,donde
jamás podré alcanzarla.
–Vete a la
chingada, Finch.
–Mejor.
Continúa. Ahora no pares. No seas una persona que espera. Viniste. Sobreviviste
a un accidente horroroso. Pero estás… aquí. Existes, como todos los demás.
Levántate. Haz esto. Haz lo otro. Enjabona. Aclara. Repítelo. Una y otra vez
para lavarlo y no tener que pensar nunca más en ello.
Me emuja sin parar.
–Deja de
comportarte como si supieras cómo me siento.
Me golpea con los puños, pero yo sigo sin moverme.
–Sé que hay
más, seguramente muchos años de mierda que has estado disimulando con una
sonrisa y ocultando.
Me pega, me pega y, de repente, se tapa la cara.
–No sabes lo
que es. Es como si tuviera en mi interior una personita rabiosa y noto que
intenta salir. Se ha quedado sin espacio porque cada vez es más grande, y más
grande. Y por eso empieza a ocuparme, los pulmones, el pecho, la garganta, y yo
la empujo hacia abajo para que no salga. No quiero que salga. No puedo permitir
que salga.
–¿Por qué no?
–Porque la
odio, porque esa persona no soy yo, pero está aquí y no me deja en paz, y lo
único que pienso es que quiero estallar contra alguien, contra quien sea, y
enviarlo a la mierda porque estoy enojada con todo.
–No me lo
cuentes. Rompe alguna cosa. Destroza alguna cosa. Arroja alguna cosa. O grita.
Sácalo de tu interior.
Violet & Finch
Es en ese momento cuando ya no puedo contenerme más,
por mucho que esté furiosa, por mucho que tal vez me odie. La atraigo hacia mí
y la beso como siempre he querido besarla, más como en una película de mayores
de dieciocho años que una apta para todos los públicos. Al principio la noto
tensa, percibo que no quiere devolverme el beso y se me parte el corazón. Pero
antes de que me dé tiempo a retirarme noto que se comba y se funde conmigo a la
vez que yo me fundo con ella bajo el cálido sol de Indiana. Y sigue aquí, y no
se marcha, y todo ira bien. Me dejo
llevar. Nos unimos a la lenta marea. Entramos y salimos, nos vemos arrastrados…
no podemos salir de esos sinuosos, dubitativos, abruptos, perfectamente
circulares muros que nos rodean.
Finch
–Te mereces
algo mejor. No puedo prometerte que vaya a seguir siempre aquí, y no porque no
quiera. Es difícil de explicar. Soy un tarado. Estoy roto y nadie puede
repararme. Lo he intentado. Lo sigo intentando. No puedo amar a nadie porque no
sería justo para quien me amara. Nunca te haré daño, no del mismo modo que sí
quiero hacerle daño a Roamer. Pero no puedo prometerte que no acabe
destrozándote, pedacito a pedacito, hasta dejarte reducida a mil pedazos, como
yo. Deberías saber dónde te metes antes de de implicarte sentimentalmente.
Finch
–Ultravioleta
Marcada, me parece que te quiero.
Finch
–¿Qué hacías
allá arriba, en aquella cornisa? –pregunto en un susurro.
–Lo mismo que
tú. Quería ver qué se sentía. Quería imaginarme saltando desde allí. Quería
dejar atrás toda la mierda. Pero cuando emprecé a imaginármelo, no me gustó. Y
entonces te vi a ti.
Violet & Finch
Haces que te ame…
Finch
–Sir Patrick
Moor era un astrónomo británico muy famoso. Tenía un programa en la BBC llamado
Sky at Night que se mantuvo en antena
más de cincuenta años. Pues redulta que el 1 de abril de 1976, sir Patrick
Moore anunció en el programa que el cielo estaba a punto de suceder algo
grande, Que exactamente a las 9:47 de la mañana, Plutón pasaría justo por
detrás de Júpiter, en relación con la Tierra. Explicó que era una alineación
excepcional que significaba que la combinación de la fuerza gravitatoria de
esos dos planetas contrarrestarían temporalmente la gravedad de la Tierra,
razón por la cual todo el mundo pesaría menos. Lo denominó efecto gravitacional de Júpiter – Plutón.
Violet está apoyada sobre mi brazo, despierta pero
adormilada.
–Patrick Moore
explicó a los espectadores que podían experimentar el fenómeno saltando justo
en el preciso instante en que se produjera la alineación. Si saltaban, se
sentirían livianos, como si estuvieran flotando.
[…]
Violet se ha incorporado y está apoyada sobre el codo,
mirándome.
–Pero ¿sucedió
de verdad?
–Pues claro
que no. Fue una broma.
Me dio una palmada en el brazo y se recuesta de nuevo.
–Has hecho que
lo creyera.
–Pero lo
comentaba para que sepas que así es como me siento en estos momentos. Como si
Plutón y Júpiter estuvieran alineados con la Tierra y yo estuviera flotando.
Tanscurrido un minuto, dice:
–Eres un bicho
raro, Finch. Pero es lo más bonito que me han dicho en la vida.
Violet & Finch
Por cierto, por si te
cirve de algo, te informo que me has enseñado una cosa, Ultravioleta: el día
perfecto existe.
Finch
Yo: Ya te dije
que siempre acababa rompiéndolo todo.
Violet: No
fuiste tú… hemos sido nosotros. Pero la culpa es mía. Por no pensar.
Yo: Estoy aquí
y solo deseo poder regresar a ayer por la mañana. Quiero que los planetas
vuelvan a alinearse.
Violet: Dales
tiempo.
Escribo: Eso
es lo único que no tengo
Lo borro
Violet & Finch
Mantente completamente inmóvil y así no te hundiras.
Finch
–Uno, te
preocupa que todo esto sea un relleno, pero ten en cuenta que las palabras que
escribas seguirán aquí cuando tú te hayas ido. Y dos, habías abandonado muchas
cosas, pero las habrías recuperado independientemente de haberme conocido o no.
Finch
–Llegará sin
que nos demos cuenta, y no estoy preparada –dice mi madre-. No sé si llegaré a
estar preparada algún día.
Mamá de Violet
–Pero estamos
en invierno y no sé donde estaré en primavera. Y ella lleva el nombre de una
flor y su padre me odia, y quiero que sepa que pienso en ella y que esta
estación no es para morir, sino para vivir.
Finch
Entramos e inspiro el dulce y vivo aroma de las
flores. Deseo quedarme aquí, donde todo es cálido y luminoso, donde podría
estar rodeado de cosas vivas y no muertas.
Finch
–Se acabó el
invierno. Finch, me has traído la primavera.
Violet
Amo: el brillo de sus ojos cuando hablamos o cuando me
cuenta cualquier cosa que quiere que yo sepa, cómo mueve los labios cuando lee
para sí misma tan concentrada, cómo me mira como si solo existiera yo, como si
pudiese traspasar mi piel y mis huesos y llegar directamente al yo que hay aquí
dentro, el yo que ni siquiera yo mismo soy capaz de ver.
Finch
A pesar de que oigo las palabras, las olvido en cuanto
son pronunciadas. Oigo fragmentos de cosas, pero nada entero.
Finch
Estoy rodeado de gente, pero solo.
Finch
Me hablan, hablan a mi alrededor, pero no los oigo.
Finch
Es difícil describirlo, pero imagino que lo que siento
en este momento debe ser muy similar a verse absorvido por un vórtice. Todo
está oscuro y gira como un remolino, pero como un remolino lento, no rápido, y
hay además un peso enorme que jala de ti, como si lo tuvieras sujeto a los pies
aunque no lo veas. Pienso: Es lo que se
debe de sentir cuando te quedas atrapado en arenas movedizas.
Finch
El futuro es incierto, aunque eso puede que sea
positivo.
Finch
Me gustaría llorar a lágrima viva, pero me digo: Disimula el dolor. No llames la atención.
Pasa desapercibido.
Finch
Nota para mí mismo: el suicidio no es cuestión de broma,
sobre todo para las figuras de autoridad que, de un modo u otro, son
responsables de ti.
Finch
–No estás
solo. –Y antes que pueda decirle. De
hecho lo estoy, lo cual forma parte del problema. Todos estamos solos,
atrapados en el interior del cuerpo y de la mente, y sea cual sea la compañía
que podamos tener en mente, y sea cual sea la compañía que podamos tener en la
vida, no es más que pasajera y superficial.
Finch &
Embrión
Tú me has
metido en esto. Lo has hecho tú. Es culpa tuya, tuya, tuya.
Finch
Estoy desapareciendo. A lo mejor ya no estoy.
Finch
Estoy roto. Soy
un farsante. Soy imposible de amar. Es solo cuestión de
tiempo que Violet se dé cuenta.
Finch
El efecto gravitacional Júpiter – Plutón es vida.
Finch
Cuando de verdad lo intente, no voy a fallar.
Finch
–No me
malentiendan, prefiero estar aquí que muerto, pero a veces tengo la sensación
de que todo lo que hacía de mí quien soy ha desaparecido.
Demetrius
–Lo hago
porque me recuerda que estoy aquí, que sigo aquí y que tengo algo que decir.
Finch
–Lo que sea.
Los pensamientos positivos van a la pared, los negativos al suelo, allí. –Señala
un montón de papeles arrugados–. Es importante anotarlos, aunque no es necesario
exponerlos una vez ya lo has hecho. Las palabras pueden llegar a convertirse en
verdaderas acosadoras.
Finch
Cuando una canción acaba siéndolo, la llevas dentro
de ti, en lo más profundo.
Violet
Escribe: Yo,
quiero, sexo, con, Ultravioleta, Marcada.
Yo escribo: Tal
vez, y él lo hace pedacitos de inmediato.
Y entonces escribo: De acuerdo.
Tambien lo rompe.
¡Sí!
Lo pega a la pared y me besa, su brazo envolviéndome
por la cintura.
Violet & Finch
–A veces me
pongo así, con estos estados de ánimo, y no puedo evitarlo. –Sigue tocando la
guitarra, sin dejar de sonreír, pero su tono de voz se ha vuelto serio–.
Estados de ánimo negros, bajos. Me imagino cómo debe ser estar en el ojo de un
tornado, en calma y cegador a la vez. Los odio.
Finch
–Ya lo he
hecho otras veces. Al final, funciona. Me despierto una mañana y me apetece
salir. –Me sonríe, pero la sonrisa me parece vacía–. Yo te guardaré el secreto,
pero tú guarda el mío.
Finch
La cadencia del sufrimiento ha empezado.
Cesare Pavese
Haces que me
sienta oro, flotando. Te quiero.
Ultravioleta Marcada.
Finch
Noto que las preocupasioes se esfuman. Me siento
relajada y feliz, más feliz que en bastante tiempo. Vivo el momento. Estoy
Aquí.
Violet
–Ser
absorvido por un agujero negro –dice– debe de ser la forma más fantástica de
morir. Aunque nadieha tenido todavía esa experiencia y los científicos no
logran ponerse de acuerdo en si te pasarías semanas flotando más allá del
horizonte de sucesos hasta quedar hecho pedazos o si te sumergirías en una especie
de torbellino de partículas y te quemarías vivo. Me gusta pensar en lo que
sentiríamos si fueramos absorbidos, así de pronto. De repente, nada de todo
esto tendría importancia. Se acabarían las preocupaciones sobre de dónde
venimos o qué será de nosotros, o sobre si volveremos a decpecionar alguna vez
a otra persona. Todo eso… desaparecería.
–Y no
quedaría nada.
–Tal vez. O
tal vez habrí un nuevo mundo, un mundo que ni siquiera podemos imaginarnos.
Violet & Finch
–Yo no
necesito ayuda. Yo no soy Eleanor. Solo porque no pudiste salvarla no tienes
por qué intentar salvarme a mí.
Finch
–¿Sabes?,
daría cualquier cosa por ser tú durante un día. Viviría y viviría y jamás me
preocuparía y estaría agradecido por tener lo que tengo.
Finch
–Escucha,
durante una gran parte de mi vida me he visto etiquetado. Soy el freak. Soy el
bicho raro. Soy el probemático. Inicio peleas. Decepsiono a la gente. No hagas enojar
a Finch, hagas lo que hagas. Oh, ahí va ese de nuevo, con uno de sus raros
sentidos del humor. Finch el Melancólico. Finch el Enojado. Finch el
Impredecible. Finch el Loco. Pero
yo no soy una compilación de síntomas. No soy la víctima de unos padres de
mierda y de una combinación química de más mierda si cabe. No soy un problema.
No soy un diagnóstico. No soy una enfermedad. No soy alguien a quien haya que
rescatar. Soy una persona. –Esboza de nuevo esa sonrisa atroz–. Apuesto lo que
quieras a que ahora sientes mucho haberte encaramado a aquella dichosa cornisa
aquel dichoso día.
Finch
–No puedo
evitarlo. Soy lo que soy. Ya te avisé de que esto pasaría.
Finch
¿Acaso a nadie
le importa por qué viene y va de esta manera? ¿Se han parado alguna vez a
pensar que tal vez sea porque algo va mal?
Finch
En un poema titulado Epílogo, Robert Lowell se preguntaba: Pero ¿por qué no contar lo que ha ocurrido?
Respondiendo a su pregunta, señor Lowell, le diré
que no estoy del todo seguro. Y que es posible que nadie conozca la respuesta.
Yo solo sé que me pregunto: ¿Cuál de mis
sentimientos es el real? ¿Cuál de mis distintos yos soy yo? En toda mi vida
solo ha habido un yo que me ha gustado de verdad, un yo que era bueno y que se
mantuvo despierto todo el tiempo que pudo.
Finch
Has sido en
todos los sentidos todo lo que alguien puede ser. Si alguien hubiera podido
salvarme, habrías sido tú.
Finch
Antes de morir, Cesare Pavese, creyente del Gran
Manifiesto, escribió: Recordamos
instantes, no días.
Finch
Recuerdo su sonrisa y su risa cuando yo era mi mejor
yo y ella me miraba como si fuera una persona sin nada malo y entera. Recuerdo
cómo me miraba de la misma manera incluso cuando ya no lo era.
Finch
La verdad es
que todos fueron días perfectos.
Finch
No estoy
desaparecido. Me has encontrado.
Finch
Empiezo a estar enojada.
Dos días más tarde, Finch escribe: Estoy en la rama más alta.
La noche siguiente: Nuestros nombres están pintados.
Días más tarde: Creo
en los carteles.
Al día siguiente: El resplandor de Ultravioleta.
Díez días después: Un lago Una oración. Es tan encantador ser encantador en Privado.
Y luego, el más completo silencio.
Violet
Germn: nombre,
principio u origen de una cosa material o moral; esbozo que da principio al
desarrollo y crecimiento.
Violet
Pienso en aquellas X, negras y grandes, con las que
tachaba cada día porque lo único que deseaba era ir dejándolos atrás.
Violet
Los momentos
felices desaparecieron por un tiempo, pero regresan.
Finch
Decca, a veces las palabras más feas esconden
belleza; el secreto está en cómo las lees.
Finch
Las palabras
están escritas en Las olas: “Si este azul estuviera ahí siempre; si este vacío
se conservara siempre; si este momento durara siempre. Siento que brillo en la
oscuridad. Estoy adornada. Estoy preparada. Es la pausa pasajera; el momento
oscuro. Los violinistas y han levantado sus arcos. Es mi llamada. Es mi mundo.
Todo está decidido y presto. Tengo raíces, pero floto. ´Ven´digo, ´ven´”
Finch
Sin duda habrá
un chico que te amar á por ser quien eres. No te
rindas.
Finch
No había nada
que pudiera haberlo hecho durar más tiempo.
Finch
Podría irme ahora mismo. Si me fuera, Theodore Finch
seguiría en el mundo, viviéndolo y recorriéndolo, aunque fuera sin mí.
Violet
No sé cómo no me di cuenta la primera vez, el agua
es tan azul como sus ojos.
Violet
No me muevo durante mucho rato. Porque si me quedo
así, Finch sigue en alguna parte.
Violet
–Marco
–susurro.
Luego: me levanto.
–Marco –digo
más fuerte.
Violet
Cada vez consigo permanecer más tiempo, pero no
tanto como Finch, que es capaz de contener la respiración durante minutos.
Que era capaz.
Porque llega un momento en que lo sé: se ha ido. No
está en alguna parte. Está en ninguna parte.
Violet
No está en ninguna parte. No está muerto.
Simplemente ha encontrado ese otro mundo.
Violet
Pienso en Finch y en sir Patrick Moore, y en
agujeros negros y agujeros azules, y en superficies de agua sin fondo, en
estrellas que explotan, en horizontes de sucesos y en un lugar tan oscuro que
ni siquiera la luz puede salir cuando logra entrar en él.
Violet
Me gustaría decirles que no se preocupen, que no
encontrarán nada, que no está ahí. Que si alguien es capaz de llegar a otro
mundo, ese es Theodore Finch.
Violet
Pero no es él. ¿No lo
ven? La gente como Theodore Finch no muere. Está de excursión, simplemente.
Violet
–Que
vaya al sol tu vista. Al cielo tu soplo vital… Eres todos los colores en uno,
con su máxima intensidad.
Violet
Me planto delante del espejo y estudio mi cara. Voy
vestida de negro. Falda negra. Sandalias negras y la camiseta negra de Finch,
que ciño con un cinturón. Mi cara parece mi cara, aunque distinta. No es la
cara de una adolescente despreocupada que que ha sido aceptada en cuatro
universidades, tiene unos buenos padres, buenos amigos y toda la vida por
delante. Es la cara de una chica triste y solitaria a la que le ha pasado algo
malo. Me pregunto si mi cara volverá a ser algún día la misma de antes, o si
siempre veré eso cuando me mire en un espejo: Finch, Elleanor, pérdida,
congoja, culpabilidad, muerte.
Violet
Yo mientras, sigo pensando en que no fue un
accidente y en lo interesante que resulta el concepto víctima de un uicidio. Lo de víctima
implica que el fallecido no tenía atra alternativa. Y tal vez Finch no
creyera que tuviera una alternativa, o tal vez no estuviera intentando matarse
sio simplemente buscando el fondo. Pero eso nunca lo sabré. ¿verdad?
Violet
Y entonces pienso: No puedes hacerme esto. Tú eras el único que me daba sermones sobre la
vida. Eras tú quien decía que tenía que salir y ver lo que tenía delante de mí
y aprovecharlo al máximo, y no desperdiciar el tiempo y encontrar la montaña,
porque mi montaña estaba esperándome, y que todo eso iba sumando a la vida. Y
luego te vas. No puedes hacerme esto. Sobre todo sabiendo lo que he pasado con
la pérdida de Eleanor.
Violet
Intento recordar las últimas palabras que le dije,
pero no lo consigo. Solo se que fueron de rabia, normales y en absoluto
remarcables. ¿Qué le habría dicho de haber sabido que nunca más volvería a
verlo?
Violet
–¿De verdad
piensas que está en alguna parte? –digo. Brenda me mira y pestañea–. ¿En algún
lugar? A mí me gusta pensar que, dondequiera que esté, tal vez esté mirándonos,
porque está vivo y en otro mundo mejor que este. El tipo de mundo que él habría
diseñado de haberlo podido hacer. Me encantaría vivir en un mundo diseñado por
Theodore Finch.
Y pienso: Durante
un tiempo, lo hice.
Violet
Tengo el calendario en un rincón. Lo despliego, lo
aliso y miro todos los días en blanco, demasiados para contarlos, que no marqué
porque fueron los días que pasé con Finch.
Pienso:
Te odio.
De haberlo
sabido.
De haber sido
yo suficiente.
Te fallé.
Ojalá pudiera
haber hecho algo.
Debería haber
hecho algo.
¿Fue culpa mía?
¿Por qué no fui
suficiente?
Vuelve.
Te quiero.
Lo siento.
Violet
Desearía romper todas esas notas y dejar que se
convirtieran en un montón de cenizas junto con el resto de palabras malas y
falsas, pues es allí donde deberían estar.
Violet
Últimamente no siento nada. He llorado algunas
veces, pero básicamente me siento vacía, como si me hubieran extirpado por vía
quirúrgica cualquier cosa que pudiera hacerme sentir, sufrir, reír y amar,
dejándome hueca como una concha sin habitante.
Violet
–Demasiado
poco, demasiado tarde –murmura Brenda.
Brenda
Usted no puede sentirse
responsable. La responsable soy yo. No intente robarme eso.
Violet
–¿Podría
haber hecho más? Seguramente. Sí. Siempre podemos hacer más.
Embrión
–No siempre
podemos ver lo que los demás no quieren que veamos. Sobre todo cuando se
esfuerzan al máximo por ocultarlo.
Embrión
Cambiada para
siempre.
He cambiado para siempre.
Violet
Debe ser un sentimiento horroroso querer a alguien y
no poder ayudarlo.
Aunque, de hecho, conozco ese sentimiento a la
perfección.
Violet
–¿Qué te
pasa por la cabeza cuando estás planteándotelo?
–¿Planteándote…?
–¿Suicidarte. Quiero saber que se siente, qué piensas. Quiero saber por
qué.
Amanda baja la vista y se mira las manos.
–Lo único
que puedo decirte es cómo me sentía yo. Fea. Asquerosa. Estúpida. Pequeña.
Inútil. Ignorada. Es como si no hubiera otra elección. Como si fuera la
alternativa más lógica porque no hay otra cosa. Piensas: Nadie me extrañará. Ni siquiera sabrán que me he ido. El mundo continuará
y dará lo mismo que yo no esté aquí. Tal vez sea mejor no estar aquí.
[…]
–En estos
momentos nada de eso importa. Es como si le estuviera pasando a otra persona,
porque lo único que percibes en tu interior es oscuridad, y esa oscuridad acaba
propagándose de ti. Ni siquiera piensas en qué podría pasarle a la gente que
dejas atrás, porque solo piensas en ti mismo. –Acerca las rodillas al pecho y
se rodea las piernas con los brazos.
[…]
–Hay
tantas cosas que todavía no sé de él. Y me imagino que ya nunca sabré–. No creo
que sus padres quisieran reconocer la existencia de algún problema.
–Él estaba intentando solventarlo
por ti
Sé que lo que dice es para que me sienta mejor, pero lo único que
consigue es que me sienta peor.
Violet &
Amanda
Circunstancias Atenuantes. Esa soy yo. Esa es Violet Markey. La pobre Violet, cambiada para siempre
y con circunstancias atenuantes. Hay que tratarla con cuidado porque es frágil
y podría romperse si se espera de que hiciera lo mismo de los demás.
[…]
Puedo hacerlo. Puedo demostrarles que no soy una muñeca de porcelana a la
que hay que tratar con sumo cuidado.
Violet
Carta a alguien que se
suicido, por Violet Markey.
¿Dónde estás? ¿Y por qué te fuiste? Supongo que nunca lo sabré. ¿Fue
porque te hice enojar? ¿Por qué intenté ayudarte? ¿Por qué no te respondí
cuando lanzaste piedrecitas contra mi ventana? ¿Y si te hubiera respondido?
¿Qué me habrías dicho? ¿Habría podido convencerte de que te quedaras o de que
no hicieras lo que hiciste? ¿O habría sucedido igualmente?
¿Sabes que ahora mi vida ha cambiado para siempre? Antes pensaba que era
así porque tú habías llegado a ella y me habías enseñado Indiana y, con ello,
me habías obligado a salir de mi habitación y abrirme al mundo. Incluso cuando
no estábamos de excursión, incluso desde el suelo de tu vestidor, siempre
estabas enseñándome el mundo. Pero no sabía que el cambio para siempre de mi
vida iba a ser porque me quisiste y luego te marchaste, y de un modo tan
definitivo como este.
De modo que supongo que al final lo del Gran Manifiesto no existía,
aunque me hiciste creer que sí. Supongo que solo había un trabajo de instituto.
Jamás te perdonaré por haberme abandonado. Ojalá tú sí pudieras
perdonarme. Me salvaste la vida.
¿Y por qué yo fui incapaz de salvar la tuya?
Violet
Tiene que haber también alguna cosa mágica. Intento encontrarla,
levantandi la cabeza y protegiéndome los ojos del sol con la mano, y justo
antes de subir de nuevo al coche, las veo: en la rama más alta del primer
árbol, colgando aisladas. Un par de zapatos deportivos con agujetas
fluorescentes, TF escrito en negro en el lateral de las dos. Una
cajetilla azul de American Spiritrd asoma en el interior de uno de ellos.
Estuvo aquí.
Violet
Llego tarde. Demasiado tarde para Finch. Demasiado tarde una vez más.
Violet
Cuando me pregunta qué color quiero, le digo que azul, un azul como el
del cielo. Vierte la pintura en un recipiente y lo observo, paralizada, incapaz
de moverme ni de respirar. Es como volver a perder a Finch.
Violet
Lo único que me hace sentir mejor es saber que, fuera lo que fuera lo que
Finch escribió, siempre seguirá allí, bajo las capas de pintura.
Violet
–No podemos volver atrás. No
podemos cambiar nada de lo que pasó. No puedo devolverla a la vida, y tampoco
puedo devolver a Finch a la vida. No puedo cambiar el hecho de que me escapara
para estar con él después de que les dijera que lo nuestro se había acabado. No
quiero pasar de puntitas junto a él, ni junto a ella, ni junto a ustedes,
porque lo único que consigo así es que me resulte más difícil recordar las
cosas que quiero recordar. Hace que me resulte más difícil recordarla. A veces
intento concentrarme en su voz solo para volver a oírla, para volver a oír cómo
me decía Hola, qué tal cuando estaba
de buen humor y Vi-o-let cuando estaba
enojada. No sé por qué, pero esas frases son las que me resultan más fáciles.
Me concentro, y cuando las tengo me aferro a ellas, porque no quiero olvidar
jamás cómo las decía.
Violet
–Les guste o no, estuvo aquí y se
fue, pero no tiene por qué irse del todo. Eso depende de nosotros. Y les guste
o no, yo amaba a Theodore Finch. Fue muy bueno para mí, aunque ustedes piensen
lo contrario y odien a sus padres y seguramente lo odien también a él, y por
mucho que se marchara y a mí me hubiera gustado que no lo hubiera hecho. Nunca
podré hacerlo volver, y es probable que se marchara por mi culpa. De manera que
es bueno y es malo y duele, pero al mismo tiempo me gusta pensar en él, porque
si pienso en él, tampoco se habrá ido del todo. Que estén muertos no significa
que no puedan existir. Y lo mismo pasa con nosotros.
Violet
De pronto, tengo uno de esos momentos que se tienen cuando has perdido a
alguien, en los que te sientes como si te hubieran dado una patada en el
estómago y te hubieras quedado completamente sin aire y piensas que nunca más
recuperarás la respiración. Ansío sentarme en este suelo asquerosa y llorar y
llorar hasta que ya no pueda llorar más.
Violet
Estuve aquí. TF
Finch
Yo también estuve aquí. VM
Violet
Aquí estamos –pienso–.
Nuestro trabajo de clase. Lo empezamos juntos y lo acabamos juntos.
Violet
El apocalipsis ultravioleta.
Le doy las gracias y de camino al coche recuerdo la
piedra, que aún tengo en la mano. La abro y allí está, la primera cosa que me
regaló y que luego yo le regalé a él. Y que ahora me ha devuelto: Tu turno.
Violet
Me queda un lugar adonde ir de excursión. Quiero postergarla al máximo
porque sé que cuando vaya allí el trabajo de habrá acabado, lo que significará
que ya no me quedará nada más de Finch pendiente de encontrar. Aunque todavía
no he encontrado nada, salvo las pruebas de que él vio todos esos lugares sin
mí.
Violet
Este lugar no lo elegimos
juntos.
Cuando me doy cuenta, se me eriza el vello de la nuca.
Es un lugar que incorporó Finch sin decírmelo.
Violet
Enseguida llegaré y entonces
todo se habrá acabado. Las excursiones, Finch, nosotros, todo.
Violet
La capilla Taylor fue creada
como santuario para que los viajeros exhaustos pudieran detenerse y descansar en
su camino. Fue construida en memoria de los que perdieron la vida en accidente
de coche y como lugar de curación. Recordamos a los que ya no están aquí, a los
que se fueron demasiado pronto y a los que siempre llevaremos en el corazón. La
capilla está abierta al público día y noche, también los días festivos. Siempre
estamos aquí.
Lámina de la
Iglesia
Ahora ya sé por qué Finch eligió este lugar. Lo hizo por Eleanor y por
mí. Y también por él, porque era un viajero exhausto que necesitaba descansar.
Violet
Entonces brillarás entre
ellos como estrellas en el cielo.
Finch
¿Estoy preparada para escuchar lo que pensaba de mí? ¿Para escuchar cómo
le fallé? ¿Estoy preparada para saber todo el daño que le hice y cómo podría,
cómo debería haberlo salvado de haber prestado más atención, haber interpretado
los signos y no haber abierto mi bocaza, de haberlo escuchado y haber sido
suficiente para él y, tal vez, si lo hubiera amado más?
Violet
Me haces feliz,
Cuando estoy contigo me
siento a salvo con tu sonrisa,
Me haces sentir atractivo,
Y cuando me toco la nariz
simplemente me parece un poquito chata,
Me haces sentir especial y
solo Dios sabe cuánto he deseado ser un chico así,
Me haces amarte,
Y eso tal vez lo más grande
que mi corazón ha sido capaz de hacer…
Me haces sentir encantador,
y es tan encantador ser encantador para la persona que amo…
Finch
Estoy llorando, con fuerza, hipando, como si hubiera contenido la
respiración durante muchísimo tiempo y por fin pudiera respirar.
Violet
La melodía me llena la cabeza y se estanca allí, como si formara parte de
mí, de tal modo que pasan los días y sigo cantándola.
Violet
No me preocupa que Finch y yo no grabáramos nada de nuestras excursiones.
No me preocupa que no nos dedicáramos a recoger recuerdos de los lugares o no tuviéramos tiempo de componerlo todo de tal manera que tuviera sentido para cualquiera que no fuera nosotros.
No me preocupa que no nos dedicáramos a recoger recuerdos de los lugares o no tuviéramos tiempo de componerlo todo de tal manera que tuviera sentido para cualquiera que no fuera nosotros.
Violet
Y me doy cuenta de una cosa: no es lo que tomas, sino lo que te llevas.
Violet
Me descalzo y me lanzo al agua, me sumerjo. Lo busco con los lentes,
aunque sé que no lo encotraré. Nado con los ojos abiertos. Emerjo a la
superficie bajo el gigantesco cielo, inspiro hondo y me sumerjo de nuevo, a
mayor profundidad esta vez. Me gusta pensar que está de excusión en otro mundo,
viendo cosas que nade puede llegar a imaginarse.
Violet
Nos parecía que su tristeza
era la de un muchacho, la melancolía viluptuosa y despistada de un muchacho que
todavía no tiene los pies sobre la tierra y que se mueve en el mundo árido y
solitario de los sueños.
Natalia Ginzburg
Theodore Finch: estuve vivo.
Ardí con incandescencia. Y luego morí, aunque en realidad, no. Porque alguien
como yo no puede morir y no muere con los demás. Permanezco ahí,como las
leyendas del Blue Hole. Siempre estré aquí, en las ofrendas y en las personas
que dejé atrás.
Epitafio de
Theodore Finch
Nado por la superficie bajo el cielo intenso y despejado, bajo el sol,
bajo todo ese azul que me recuerda a Theodore Finch, del mismo modo que todo me
recuerda a él, y pienso en mi epitafio, pendiente aún de escribir, y en todos
los lugares que recorreré. Ya no tengo raíces, pero floto, toda de oro. Siento
que mil posibilidades nacen de mí.
Violet
Me
despido lector, que tengas unas maravillosas y mágicas lecturas.
Hermoso Libro😍
ResponderBorrarHermosas Frases✨
Como se llama el libro
BorrarViolet y Finch
BorrarVerdad? Es de mis favoritos.
BorrarEstuve aqui
BorrarAmo
ResponderBorrarHermosas frases, no paro de leerlas!
ResponderBorrarLa primera vez que la vi, lo entendi todo
ResponderBorrarAmo el libro...
ResponderBorrarAMOOO❤
ResponderBorrarMe podrían decir cómo son las frases donde ellos dos están la bicicleta y cuando están hablando por e-mail
ResponderBorrarMuy buena
ResponderBorrarCómo se llama el libro
ResponderBorrarAmo ❤️
ResponderBorrarAme esto enserió ;)
ResponderBorrarAme esto enserió ;)
ResponderBorrarNo recordamos días, recordamos momentos
ResponderBorrar